Queridos Reyes magos:
El año recién comienza, cada día es un reto para seguir la dieta sin
gluten. Soy pequeño(a) y es difícil comprender por
qué no puedo comer lo que se me antoje, que me lo compren o que me sea convidado por los que me rodean.
Quiero pedirles que el resto de mi familia, mis maestros y compañeros,
dejen de decirle a mamá, que está mal
que me tenga a dieta o que es exagerada. Que le tengan confianza, pues ella
sabe lo que es bueno para mi y lo hace porque sigue instrucciones del doctor.
Qué comprendan que cada vez que la contradicen y me dan de comer “un
pedacito” “un sorbito” de algo que no debo comer, ponen en riesgo mi vida.
Por favor! entiendan que me
enferman.!!
Yo sólo quiero vivir sano y feliz como cualquiera.
Recuerden que soy menor y la prudencia debe venir de parte de los adultos.
Atentamente:
Te invitamos a compartirlo en tus redes sociales. Gracias!